Vitamina D

Aliada para vencer la osteoporosis.

En personas adultas, la carencia de vitaminas D, además de otras causas, puede llevar al desarrollo de osteoporosis.

El cuerpo necesita de la vitamina D para absorber el calcio y mantener los huesos fuertes. Sin la vitamina D, el cuerpo no logra formar la cantidad suficiente de la hormona cacitriol, conocida como vitamina D activa. Esto reduce la cantidad de calcio que absorbe el cuerpo lo cual lo abliga a utilizar el calcio depositado en el esqueleto, debilitando los huesos e impidiendo la formación de hueso nuevo y fuerte.

Ciertos grupos son más propensos a sufrir de deficiencia de vitamina D como los adultos mayores de 50 años. Durante el proceso de envejecimiento, la piel pierde la habilidad de sintetizar la vitamina D eficientemente y los riñones son menos capaces de convertir la vitamina D en una hormona activa.

Para la mayoría de las personas, una gran fuente de vitamina D es la exposición a los rayos ultravioleta provenientes del sol, pero debido a los efectos que ha demostrado tener el sol en la salud de la piel, y las preocupaciones que existen sobre el cáncer de piel en algunas personas prefieren no tener exposición al sol, se cubren con ropa y también utilizan bloqueadores solares que limitan la capacidad de la piel de aquirir la vitamina D.

Aunque la vitamina D se puede encontrar en ciertos alimentos, a diferencia del calcio, no se obtiene fácilmente a través de la dieta, ya que se encuentra solo en un pequeño número de alimentos, tales como la yema de huevo, el hígado, las ostras y algunos pescados con alto contenido graso.

La Fundación Nacional de Osteoporosis, recomienda que adultos menores de 50 años reciban una dosis diaria de 400-800 unidades internacionales de vitamina D y que los adultos mayores de 50 años reciban una dosis diaria de 800-1000 de vitamina D.

Para las personas que sufren de osteoporosis, se recomienda incrementar sus niveles de vitamina D y calcio; ya que existen estudios que demuestran que reducen el recambió óseo.